lunes, 1 de julio de 2013

Vulnerable, deseable.. felicidad.

Como la heroína para el drogadicto, como el azúcar del diabético, como el sexo del ninfómano..
La necesidad de algo que te hace daño, de algo que te hunde pero a la vez consigue tu felicidad, aunque no duradera, pero en ese instante, siempre eterna.
Así ando yo, pero maldita mi vida que no me ofrece una droga, que no me ofrece una enfermedad, maldita mi vida que quiere que vuelva a amar, y yo lucho contra mi, contra lo inluchable, lucho contra mi otro yo..
Como si en esta batalla pudiese conseguir algo y se me olvida lo básico que mi contrincante conoce mejor que yo mis propios pasos..
No me quedan más opciones, viviré esta eterna aunque mísera y vulnerable felicidad, hasta que algo decida que corte con mis vicios.

Y como lastre, nuestros recuerdos.

Decidí hace meses olvidarme del amor, y no sólo de él sino de todo lo que él conlleva, olvidarme de los 'me gustas' y de los 'mañana nos vemos', pero está visto que se ha vuelto imposible ...
Me he dado cuenta de que las personas estamos atadas a lo que sentimos y en verdad esos sentimientos no dejan de forjar en nosotros, cada día del año, lo que somos, de tal manera que al final del camino el único dueño que tendremos será el corazón, y dará igual el sufrimiento que haya de por medio, las putadas y los llantos, que si nuestro humilde jefe nos pone unas vendas y nos dice que adelante, nos tiraremos al abismo, y de buenas o malas maneras, conseguiremos alzar el vuelo, porque es cierto la razón afirma que el ser humano es incapaz de volar, pero si  el corazón gritando nos dice que si quieres, puedes, tú vas y lo haces.
Y ese es mi gran objetivo conseguir que algún día olvide el sufrimiento y olvide todo ese dolor que me atormenta que se aferró a mi en el pasado y que no consigo quitarme, porque al fin y al cabo, y como todos los seres humanos de este maldito lugar soy y seré siempre esclava de mis pasiones, y aunque mi humilde razón me obligue a olvidar tan sólo conseguiré hundirme más en este lastre que llevo conmigo.